El protocolo de profesionalización del PAIME, según se expuso, se basa, fundamentalmente, en tres puntos. El primero de ellos está relacionado con su funcionamiento. Se trata de identificar en un documento, base del protocolo, una serie de items relativos al responsable del Programa en cada Colegio de Médicos, las personas que forman parte del equipo terapéutico, el lugar donde se van a atender a los pacientes, y el establecimiento de un teléfono para la asistencia a estos compañeros.

El segundo punto del protocolo tiene que ver con la documentación justificativa así como la derivada de la labor asistencial. Mientras, el tercer punto está enfocado a los profesionales que prestan asistencia en el PAIME, mediante una declaración firmada que contempla cuestiones sobre el grado de conocimiento del Programa por parte de los clínicos, la Guía PAIME, el contrato terapéutico, y la participación de éstos en trabajos científicos y de investigación, entre otros. La finalidad es recabar su compromiso con el Programa y todos los aspectos concernientes.

Tras la cumplimentación de dichos puntos por parte de cada Colegio de Médicos, éste emitirá un certificado que enviará al Consejo Andaluz de Colegios de Médicos (CACM) que, a su vez, certificará, que dicho Colegio cumple con el protocolo establecido para el PAIME. Todo ello, según se acordó, servirá para homogeneizar tanto el funcionamiento del Programa como la asistencia que se presta, conforme a unos estándares de calidad.

La idea que se tiene desde el CACM es que esta profesionalización del PAIME puede servir en el futuro para abrir el Programa a otras profesiones, a través de convenios y con unas condiciones preestablecidas para toda la comunidad autónoma andaluza.

Como se recuerda desde el Consejo Andaluz, el PAIME es un programa dirigido a problemas de salud mental y/o adicciones que garantiza la confidencial absoluta del colegiado enfermo, con el objetivo de lograr su recuperación y su reinserción en el ejercicio profesional con las máximas garantías para su salud y la calidad asistencial de los pacientes.

Se trata de una prestación colegial, de médicos para médicos, pensado para superar las barreras que impide a ciertos profesionales verse como pacientes. No se limita a una asistenta médica especializada, sino que también incorpora aspectos sociales y legales que pudieran derivarse de este tipo de situaciones. "Garantizar al médico la confidencialidad del tratamiento, la confianza y complicidad en afrontar el problema, así como la búsqueda de soluciones, es garantía para que el médico enfermo tome conciencia de su problema, decida pedir ayuda y acceda al programa", según concluyó el CACM.

FUENTE: médicosypacientes.com/CACM

Acceso Área Privada Colegiados

Nº colegiado:

Contraseña:

Acceder   Cancelar

Recordar contraseña o Solicitar acceso